Etiquetas

lunes, 4 de julio de 2011

VIA FERRATA "LA SEVILLANA" EN EL TAJO DE RONDA

Localización: Serranía de Ronda. Cordillera Penibética. Sistemas Béticos.
Localidad de acceso: Ronda.
Inicio y final: Puerta del Viento.
Duración: 15' aproximación - 30' ferrata - 10' regreso

Después de hacer la vía ferrata de Benaoján y de pasear por el casco histórico de Ronda, nos dirigimos hacia su famoso Tajo para hacer la primera ferrata que se instaló en toda la Serranía de Ronda. De hecho esta ferrata fue construida en los años veinte del siglo XX por los trabajadores de la empresa La Sevillana para levantar los muros de mampostería que sujetan el Tajo de Ronda para proteger de derrumbes y de caída de rocas a los antiguos molinos que están en el fondo del Tajo. Manteniendo el material original lo que se ha hecho es comprobar y afianzar la seguridad de cada peldaño y añadir el cable de seguridad.
La Sevillana es una vía muy sencillita y corta, perfecta para iniciación pero sabiendo que la salida del primer largo tiene un poco de desplome algo durillo. Pasado ese pequeño desplome la vía tiene dificultad cero y sólo nos queda disfrutar de una subida vertical mientras alucinamos y gozamos del Tajo de Ronda y el Puente Nuevo.

Para llegar tendremos que buscar en Ronda el Barrio de San Francisco y coger ahí un carril empedrado que baja hasta los Molinos del Tajo. Aparcaremos en el lateral del camino a la altura de la Puerta del Viento. Pasaremos andando bajo esta puerta y seguiremos el camino de la Muralla de Albacara hasta la Puerta de Los Molinos. Pasamos la puerta y seguimos el sendero que va en dirección a Los Molinos cerca del río Guadalevín. En un momento dado saldrá un sendero a la derecha que sube hacia el inicio de la vía. Cuando nosotros fuimos la vegetación estaba muy enmarañada y densa y en un principio nos pasamos de largo el sendero, pero si está desbrozado no tiene pérdida posible.

Después de aparcar, echamos a andar y pasamos por la Puerta del Viento. Esta puerta era parte de la Muralla de Albacara que fue construida en el siglo XIII para proteger la parte productiva de la ciudad.

Y en seguida avistamos el impresionante Tajo de Ronda y el Puente Nuevo. El Tajo de Ronda tiene 50 metros de ancho y 100 metros de altura. Es una garganta que ha sido excavada por el río Guadalevín al que vemos precipitarse abajo del todo en una bonita cascada. Luego contaré un poco más del puente.

Entre los muros de la Muralla de Albacara.

Inmediatamente antes de empezar la vía tenemos que atravesar esta parte de la muralla invadida por la vegetación. Ojito que justo antes de la repisa de inicio de la vía tendremos que sortear un gran agujero en el suelo con el arroyo corriendo por debajo.

Nieves saliendo del desplome del primer largo.

El primer paso de este segundo largo también escupe un pelín. Pero no tiene dificultad realmente.


Luego ya sólo resta seguir superando una sucesión de cortos resaltes verticales muy sencillitos.


Ahora más arriba volvemos a echar un vistazo al Puente Nuevo. Construido entre 1759 y 1793 sustituyó al anterior puente que se derrumbó en 1740. José Martín de Aldehuela fue el maestro que finalizó la obra. En la parte de arriba del puente, entre los dos arcos pequeños, están las dependencias del puente que también fueron utilizadas como prisión durante una época.

Una cortita travesía hacia la derecha pone final a la ferrata.

Y antes de despedirnos echamos un último vistazo al impresionante Tajo de Ronda.

Como conclusión hay que decir que esta ferrata nos hará pasar un rato muy agradable. Aunque no supone ningún reto montañero ni deportivo, sí que tiene dos cosas importantes: es una ruta perfecta para iniciación (teniendo en cuenta lo del desplome inicial) y sobre todo que el entorno en el que está y las vistas que tenemos todo el rato ya merecen la pena por sí solas. 
Así que si bien como ferrata no es nada del otro mundo, sí que es una inmejorable manera de acercarse a contemplar y disfrutar este precioso rincón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario